El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha visitado esta mañana el Campus de Guadalajara de la Universidad de Alcalá (UAH), en el antiguo colegio de las Cristinas, junto con el rector de la Universidad, José Vicente Saz y un gran despliegue de autoridades locales, provinciales, autonómicas y nacionales. Y es que, tocaba ya ponerse el chaleco reflectante y el casco para visitar el gran proyecto educativo por excelencia de esta provincia, ya que se acaban de licitar las obras del edificio polivalente, que se levantará sobre el parking subterráneo, para lo que la Consejería de Educación ha tenido que desembolsar 4 millones de euros y ha pasado más de un año desde la última vez que se reproducía esta fotografía con el inicio de los trabajos del edificio principal, adjudicados a Ferrovial Construcción por 35.032.755 euros, y había que actualizar la información sobre la marcha del proyecto.
Así que García-Page volvía a visitar las obras del Campus aunque, una vez realizada la misma, rodeado de técnicos de Ferrovial y autoridades, con dos consejeros, el de Educación, Amador Pastor, y la de Igualdad, Sara Simón; el presidente de las Cortes de Castilla-La Mancha, Pablo Bellido; la alcaldesa de Guadalajara, Ana Guarinos; el presidente de la Diputación, José Luis Vega; el diputado nacional y concejal socialista, Alberto Rojo; el delegado de la Junta, José Luis Escudero, y representantes de la Delegación de la Junta y la Corporación Municipal, se marchaba rápidamente a Torija, sin hacer declaraciones, donde ha inaugurado el primer centro de datos en España de la compañía Fortinet.
Una visita que, dado el despliegue de autoridades y por motivos de seguridad, dejaba a los periodistas adivinando desde la entrada cómo marchan los trabajos en el interior del edificio principal y a la espera del parte de obra. La buena noticia es que parece que el proyecto progresa adecuadamente y podrá estar terminado a finales de 2026, para empezar a funcionar en 2027, con capacidad para cerca de 5.000 alumnos.
Así lo ponía de manifiesto el rector, que aprovechaba para hacer balance de todos los hitos y avatares por los que ha pasado este proyecto, que no han sido pocos. Vicente Saz recordó que entre el Ayuntamiento de Guadalajara y la Junta de Comunidades adquirieron los terrenos que se encontraban en poder del Ministerio de Defensa, para cederlos a la Universidad de Alcalá. El Ayuntamiento también le cedía el parque del Coquín y posteriormente se ejecutó el vallado perimetral que cierra todo el recinto del Campus, que tal y como señaló, es un cerramiento “de un alto valor económico y simbólico, puesto que representa a la Universidad”.
Esto dio paso a un periodo de estudio, con los consiguientes trabajos arqueológicos, durante los que apareció una necrópolis visigoda, “que hubo que exhumar prácticamente entera, lo cual nos llevó unos seis meses, un tiempo con el que no contábamos para la construcción del Campus”, a lo que se sumaba la pandemia.
El siguiente paso fue la construcción de un aparcamiento subterráneo en esa misma zona, con unas 350 plazas, sobre el que ya se preveía la construcción de un aulario, “que ya se ha licitado y está en fase de adjudicación, con lo que confiamos que en primavera empiecen ya las obras”. El edificio, según adelantó el rector, contará con unas 12 aulas e incluye un gran salón de reuniones, un atrio para congresos y una capacidad de alrededor de un millar de alumnos: “Será un edificio muy diáfano y dará apoyo al edificio principal del Campus, que es el el edificio del antiguo colegio de las Cristinas”.
Paralelamente, el edificio principal se vaciaba y se eliminaban tabiques y columnas para redistribuir y adaptar el espacio a las nuevas funciones, con aulas más amplias.
En diciembre de 2023 se adjudicaba la obra de este edificio principal, “la más importante del Campus, que va a llevar prácticamente tres años realizarla y esperamos que se finalice a finales de 2026”. La obra fue adjudicada a Ferrovial por más de 35 millones de euros, un presupuesto más elevado de lo previsto, debido al coste de los materiales de construcción y que, tal y como recordaba Vicente Saz, ha sido posible gracias a que el Gobierno regional implementaba la partida destinada al Campus de Guadalajara.
El edificio tendrá unos 15.000 metros cuadrados útiles, “un edificio muy grande, con capacidad para todo el personal de administración y servicios, para los despachos de los profesores y estudiantes. La capacidad para la actividad docente, entre aulas y laboratorios, va a ser de unos 3.000 estudiantes”. Según los cálculos de rector, teniendo en cuenta la facultad de Educación, con unos 700 u 800 alumnos, el nuevo Campus de la UAH en Guadalajara tendrá una capacidad cercana a los 5.000 estudiantes.
Se trata de una obra “muy compleja”, según el representante de la UAH, que va a dar lugar a un edificio muy visible, en la parte que da a la Avenida del Ejército: “Se ha construido en cada uno de los módulos de los peines unas escaleras que irán cubiertas por unas láminas de cristal, de tal manera que por el día tendrán un efecto espejo, pero en cuanto se ilumine, se verá a las personas que están dentro transitando, trabajando, etc.,” con lo que va a ser “un edificio muy luminoso, trasparente y abierto”.
Por su parte, la alcaldesa de Guadalajara destacaba la colaboración institucional para poner en marcha este proyecto y no perdía la oportunidad de recordar que fue un Ayuntamiento del PP el que apostaba por un campus universitario en el centro de la ciudad, concretamente con Antonio Román al frente, y el papel que tuvo en la cesión de los terrenos de las Crisitinas en 2018, de los que era propietario en un 80%. Unos terrenos que intercambió a Defensa por las parcelas municipales que el Ministerio requirió, valoradas en unos 8 millones de euros.
Tampoco se olvidó de reclamar el proyecto para una nueva estación de autobuses, que se ha quedado fuera de los presupuestos de la Junta, o de poner sobre la mesa el problema de la vivienda que sacude a esta ciudad y la necesidad de una residencia universitaria para recibir a los nuevos estudiantes, pero se olvidó de todos los años durante los cuales el proyecto del Campus de Guadalajara permaneció olvidado y metido en un cajón, junto con otras infraestructuras como la ampliación del Hospital, cuando su partido se encontraba en una posición inmejorable, al frente de todas las instituciones.
Hablando de vivienda, también rescató los proyectos que ha puesto en marcha el Ayuntamiento para construir unas 400 viviendas de protección, tanto en régimen de alquiler, como de venta. Un proyecto que aborda con la colaboración del Gobierno Central y la Junta, que dejaba iniciado su antecesor, Alberto Rojo, con viviendas de protección oficial, que en esta legislatura han pasado a ser de Precio Tasado y que se van adjudicando, pese a las dificultades iniciales a modo de licitaciones desiertas.
Por último, el consejero de Educación, Amador Pastor, cogió el guante y recordó a Guarinos que todavía quedan plazas libres en la residencia de estudiantes de la Junta en Guadalajara, para aquellos alumnos que lo puedan necesitar. Pastor, que también destacó la importancia del diálogo y la colaboración institucional para la materialización de este Campus universitario, cifró en casi 50 millones de euros la aportación de la Junta, a través de un contrato-programa suscrito con la universidad para su desarrollo.
“Ha sido gracias a ese diálogo continuo y permanente como se han ido salvando ciertas dificultades”, ha dicho el consejero, que señaló que a finales de 2024 se daba el visto bueno a una partida de 4 millones de euros para la construcción del edificio polivalente sobre el aparcamiento, que se licitó en diciembre y cuyas obras se iniciarán en primavera, tal y como avanzaba el rector.
Pastor destacó la visión de futuro del nuevo campus, “apostando por la sostenibilidad y la eficiencia energética y generando espacios cómodos para la docencia y el alumnado”. Para el consejero, los espacios universitarios “tienen que conjugar la transferencia de conocimiento y también la investigación”.
En este sentido, anunció la publicación mañana en el Diario Oficial de Castilla-La Mancha, de las bases reguladoras de la nueva convocatoria de proyectos que generarán contratos postdoctorales, que amplía su duración de dos a tres años, y cuenta con una dotación de 1,8 millones de euros, para la contratación de 17 alumnos postdoctorales. “Esta convocatoria estará abierta a las universidades, también a la UAH, y a todos los agentes públicos de innovación como el Parque Científico y Tecnológico, o el Centro Nacional del Hidrógeno”, concluía el consejero, poniendo fin a la visita.