Los niños y niñas nacidos en 2021, acompañados por sus familias, participaron ayer domingo en la actividad 'Un nacimiento, un árbol', organizada por el Ayuntamiento de Guadalajara
La finca municipal de Castillejos acogió ayer domingo la tercera edición de la actividad 'Un nacimiento, un árbol', organizada por el Ayuntamiento de Guadalajara con el objetivo de promover la conciencia ambiental y fortalecer el vínculo entre la ciudadanía y el entorno natural.
Durante la jornada participaron 200 familias, entre niños y niñas, padres, madres y hasta abuelos. Se plantaron 200 nuevos árboles -jóvenes ejemplares de fresnos, encinas, acebos y pinos- en el denominado 'Pequeño Bosque', correspondientes a todos los niños nacidos en la ciudad durante el año 2021.
Cada familia, una vez plantado el árbol, identificaba su ejemplar colgando una pequeña placa artesanal, realizada previamente con el nombre de esos niños y niñas nacidos hace cuatro años en Guadalajara, dando ese margen desde el nacimiento, para que sean los propios pequeños los que participen en la plantación, a menudo acompañados por hermanos que ya lo hicieron previamente.
La alcaldesa de Guadalajara, Ana Guarinos, quien aprticipó activamente en la jornada, destacó la importancia de esta iniciativa para la conservación del medio ambiente y la educación ecológica de los más pequeños: "Cada árbol plantado hoy representa un compromiso con nuestro planeta y una inversión en el futuro, afirmó. Recordó además que la finca de Castillejos, con sus 120 hectáreas de extensión, es un verdadero pulmón verde para la ciudad de Guadalajara, en el que estas plantaciones que se realizan cada año contribuyen significativamente a la conservación de la biodiversidad en este enclave natural privilegiado.
El concejal de Medio Ambiente, José Luis Alguacil, también presente en el evento junto a la cuarta teniente de alcalde, Isabel Nogueroles, subrayó el éxito de esta actividad y la importancia de generar un vínculo entre la ciudadanía y Castillejos: "Seguimos apostando por esta actividad que genera una gran ilusión, especialmente a las familias que durante el resto del año visitan la finca para ver cómo crecen los árboles que han plantado", concluyó.