El conjunto alcarreño salvó un punto en el tramo final ante el Barakaldo y se mantiene entre los mejores del grupo, aunque suma ya cuatro jornadas sin ganar y el malestar por el arbitraje y el uso del VAR vuelve a estar sobre la mesa
El CD Guadalajara cerró el duelo del sábado con un 1-1 que deja sensaciones encontradas: por un lado, continúa en la zona noble con 12 puntos y sigue sin perderle la cara a la categoría; por otro, el equipo acumula cuatro jornadas sin victoria y volvió a verse condicionado por un arbitraje que generó frustración en el banquillo morado.
El partido se torció en la segunda mitad, cuando el Barakaldo se adelantó transformando un penalti señalado tras una larga revisión en el VAR (70'). Hasta ese momento el choque venía siendo igualado, con un Dépor intermitente pero insistente y con un Zarco de nuevo muy seguro evitando males mayores. Pere Martí agitó entonces el banquillo y la reacción llegó en el tramo final: Cañizo firmó el 1-1 en el 87’, y el Pedro Escartín empujó al equipo hasta el último suspiro en busca del 2-1, que rozó en varias llegadas consecutivas.
Tras el encuentro, el técnico alcarreño se mostró especialmente crítico con la situación arbitral y, más aún, con la dinámica que está generando el VAR en la categoría:
"No sé lo que ha pasado. El problema de todo esto es que está montado el chiringuito de tal forma que no puedes hacer mucho más que seguir. En la primera parte no hemos estado mal, pero nos ha faltado frescura. Nos ha faltado todo en general. Se ha ido un poco de las manos todo. Me voy con una sensación tan mala. No de ahora, sino de lo que llevamos viviendo este año".
Martí también admitió que el equipo no estuvo en su mejor versión ofensiva, pero valoró el punto en un partido incómodo y emocionalmente pesado: "No hago responsable a nadie. El primer responsable de hoy soy yo. A mí no me ha gustado en exceso mi equipo, por decirlo de alguna forma. Hemos salvado un punto, lo cual me encanta porque en un partido feo y contra un rival duro hemos conseguido, entre todos, salvar un punto y hemos tenido la de Cañizo para poder llevarnos el partido”.
Con este empate, el Guadalajara se mantiene quinto con 12 puntos, firmando un arranque que sigue muy por encima de las expectativas de un recién ascendido, aunque ya son tres empates y una derrota en las últimas cuatro jornadas. La sensación es la de un equipo sólido, competitivo y vivo, al que solo le falta reencontrarse con la victoria para volver a impulsar su dinámica.
Este próximo sábado (16:15 horas), los morados volverán a la competición para medirse al Arenas de Getxo en una cita clave para romper la racha y recuperar el pulso ganador.