EDITORIAL. 25N: ausencias, errores, negacionismo y butacas vacías

La Sala Tragaluz del Teatro Auditorio Buero Vallejo acogía el martes el acto institucional con motivo del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres, que este año ha organizado el Ayuntamiento de Guadalajara. Se trata de un evento que trata de mostrar la unidad institucional de las administraciones local, provincial y autonómica contra esta terrible lacra, que en lo que va de año se ha cobrado la vida de 38 mujeres y tres menores. 

Desde enero de 2003, fecha en la que la Delegación del Gobierno contra la Violencia de Género comenzó los registros, han sido 1.333 los feminicidios cometidos y 65 los niños y niñas asesinados. Unas cifras escalofriantes que ponen de manifiesto una terrible realidad: las mujeres continúan siendo maltratadas y asesinadas por el mero hecho de serlo por sus parejas o ex parejas y sus hijos e hijas se convierten en las víctimas inocentes de una violencia vicaria totalmente incomprensible e inhumana.   

En la Sala Tragaluz, con capacidad para 133 personas, hubo ausencias destacadas. Demasiadas butacas vacías que demuestran que este tipo de actos institucionales se han convertido en citas ‘de agenda’, especialmente para nuestros representantes políticos, más que en actos realmente reivindicativos, de sensibilización, de denuncia y de luto. 

Faltaron caras del Ayuntamiento. Algunas suponemos que como forma de protesta por el hecho de que en el equipo de Gobierno esté representada una ultraderecha que niega la violencia MACHISTA. Como nos gusta tirar de la RAE, la palabra ‘Machismo’ aparece con dos acepciones: “Actitud de prepotencia de los varones respecto de las mujeres” y “Forma de discriminación sexista caracterizada por la prevalencia del varón”. Y esas tesis son precisamente las que niega Vox.

Como ejemplo, esta frase del concejal de Seguridad reflejada en una nota de prensa del Grupo Municipal tras la presentación de una moción por parte del PSOE con motivo del 25N: "La violencia no tiene sexo, tiene culpables y tiene víctimas. Vox no niega la violencia. Nuestro objetivo es claro: proteger a todas las víctimas, sin excepciones, ni etiquetas".

Y lamentablemente, este es el discurso que le ha ‘comprado’ el PP a los ultras. O al menos el que trata de blanquear. No dudamos que el Partido Popular es totalmente contrario a la violencia contra las mujeres, pero gobernar con quienes la niegan a cada oportunidad que se les presenta, deja en muy mala posición al equipo que capitanea Ana Guarinos.

También faltó en el acto algún cargo de la Diputación. No hace falta mirar muy lejos para saber quién o quiénes a tenor del discurso del portavoz de Vox en la institución en un Pleno que debatía también una moción socialista sobre la violencia contra las mujeres: "No podemos apoyar la moción del Grupo Socialista ya que no se limita a condenar la violencia ni a reforzar la protección de las víctimas, sino que utiliza el 25N para apuntalar el marco de la ideología de género, llamar violencia machista a lo que no lo es y blindar políticas que llevan años fracasando". Sin comentarios. 

También se echó de menos en el acto institucional la presencia del movimiento feminista de la ciudad. Lógico, porque no se invitó a sus representantes, a las que el Ayuntamiento ningunea día sí y día también, según denuncian sus represantantes. Está claro que el feminismo molesta a algunos en la Casa Consistorial. 

Hablaba la alcaldesa en su discurso de unidad institucional en una sala en la que hubo demasiadas sonrisas forzadas -especialmente en la foto de familia-, muchos saludos incómodos y dos ‘bandos’ claramente diferenciados entre las primeras butacas, éstas sí, al completo. 

Tambien hablaba la regidora de que la lucha contra la violencia de género "no es una cuestión de izquierdas ni de derechas, no es una cuestión de ideologías, sino una realidad social que hay que combatir por encima de las diferencias y, en esta tarea, no caben errores". Errores -demasiados e injustificables- ha habido. Por parte del Gobierno central (pulseras que no funcionan y una más que cuestionable Ley del ‘Sólo sí es sí’. Pero también por parte del Gobierno municipal, cuyo concejal de Igualdad ha tratado de minimizar los graves problemas que viene arrastrando desde hace un año el Centro de Atención a Mujeres Víctimas de Violencia de Género que gestiona a través de una empresa privada, hablando de "alarmas injustificadas" y de “exageraciones”, cuando su propio departamento ha elaborado un demoledor informe que debería sonrojarle.   

Y hablando de ausencias, fue sonora la del presidente del PP de Castilla-la Mancha, Paco Nuñez en el acto institucional del 25N celebrado en Molina de Aragón, organizado por el Gobierno de Castilla-La Mancha. Sonora porque aunque lleva años dando la espalda a las víctimas de violencia machista de la región evitando asistir a actos similares, el líder de los populares se ausentó para darse un 'garbeo' por Azuqueca de Henares -con rueda de prensa incluida- dentro de su campaña de apoyo a los autónomos. Tremendo. Será que no hay días en el calendario para realizar una actividad en una localidad que además le pilla a un paso de su casa. Un gesto muy feo el del máximo responsable del principal grupo de la oposición en las Cortes de Castilla-La Mancha. Una dejación de su responsabilidad política y de la empatía necesaria hacia las mujeres que dice defender. 

Ausencias, negacionismo, errores… Un ejemplo muy poco edificante en una fecha tan importante como el 25N. 1.333 asesinatos machistas, 65 niños y niñas muertos, cientos de mujeres que viven día a día en nuestro país, en nuestra región y en nuestra provincia con el yugo de la violencia sobre sus cabezas. Mujeres que ven truncadas sus vidas. Muchas de ellas sin escapatoria. Y, a cambio, obtienen ausencias, negacionismo, errores, abandono y… butacas vacías. 

Lamentable. Y triste, muy triste.