El SANICENTRO Balonmano Guadalajara firmó en Nava un triunfo que vale algo más que dos puntos

El conjunto alcarreño conquistó el pasado viernes una trabajada victoria a domicilio frente al Viveros Herol BM Nava (29-30), un resultado que confirma su reacción competitiva tras el empate ante Ademar León. Los morados encadenan su segundo partido consecutivo sumando en la Liga ASOBAL y abandonan por fin el último puesto de la clasificación tras el empate del Balonmano Cangas

Domingo y mejores sensaciones para el SANICENTRO Balonmano Guadalajara, que ha dejado atrás una semana marcada por su triunfo en Nava de la Asunción. Dos días después, el eco del 29-30 aún resuena como uno de esos resultados que valen más por lo que simbolizan que por lo que suman: carácter, madurez y una confirmación de que el equipo de Juan Carlos Requena empieza a encontrar su sitio en la competición.

El viernes, en un Pabellón Guerrer@s Naveros exigente, el conjunto morado firmó un partido serio de principio a fin, agarrado a una defensa ordenada y a una portería que volvió a aparecer en los momentos calientes. Guadalajara arrancó mejor, mandó en el marcador durante buena parte del primer acto y obligó al conjunto segoviano a remar para equilibrar el choque antes del descanso (14-13). Aun así, el guion no se torció: el equipo sabía que tocaba resistir, ajustar y golpear cuando tocara.

La segunda mitad tuvo de todo: alternancias, momentos de sufrimiento y una recta final en la que los pequeños detalles decidieron. Requena tiró de rotación, Nico García sostuvo al equipo en cada balón comprometido y la primera línea encontró soluciones cuando el partido parecía romperse hacia el lado local. El empuje de Juan Jodar, siempre fiable en los lanzamientos, la pausa de Velasco en la dirección y la aportación de Ganuza desde el extremo mantuvieron vivo al SANICENTRO cuando Nava se puso dos arriba en el minuto 45.

Y, como ocurre en las noches que se recuerdan, apareció la respuesta colectiva. Robo, contraataque, portería y un temple poco habitual en equipos que llegan desde abajo en la tabla. Los morados igualaron el encuentro, volvieron a ponerse por delante y resistieron un tramo final de infarto en el que el acierto de Nico García desde los siete metros y el último gol de Marcos Dorado terminaron por sellar la victoria. Un 29-30 que supone mucho más que una victoria a domicilio: es una declaración de intenciones.

Con este triunfo, el SANICENTRO BM Guadalajara suma ya 5 puntos en la Liga ASOBAL, encadena dos jornadas consecutivas puntuando (el empate ante Ademar y la victoria en Nava) y abandona el farolillo rojo tras el empate del Balonmano Cangas. Una inyección anímica imprescindible para seguir creciendo.