El Gobierno de Castilla-La Mancha ha vuelto a expresar su firme oposición al retraso en la modificación de las reglas de explotación del trasvase Tajo-Segura durante la reunión del Consejo Nacional del Agua celebrada este jueves en Madrid. La consejera de Desarrollo Sostenible, Mercedes Gómez, ha lamentado que esta cuestión no figure nuevamente en el orden del día del órgano estatal, una situación que ha calificado como “un grave incumplimiento de numerosas sentencias judiciales”.
En declaraciones previas al Consejo, Gómez ha subrayado la decepción del Ejecutivo regional ante la falta de avances en un compromiso que, según ha recordado, se arrastra desde hace dos años. “Seguimos sin tener información y sin ningún planteamiento encima de la mesa”, ha señalado, advirtiendo de que Castilla-La Mancha “no va a aguantar más” si el Ministerio continúa aplazando la revisión de unas reglas que considera obsoletas.
Nueva estructura para la gestión del agua
La consejera ha defendido el nuevo modelo organizativo que prepara el Gobierno regional para reforzar la gestión del agua en la Comunidad Autónoma. Este modelo se basará en la integración de las competencias de la Agencia del Agua de Castilla-La Mancha dentro del organigrama de la Consejería de Desarrollo Sostenible, de manera que será la propia consejera quien asuma directamente estas funciones a través de una Dirección General del Agua.
“El agua es crucial para el desarrollo de nuestra región y debe ocupar el lugar que le corresponde dentro de la Consejería”, ha afirmado Gómez, que ha explicado que este cambio permitirá una gestión más directa y eficaz. Paralelamente, se reforzarán las funciones de la entidad pública Infraestructuras del Agua de Castilla-La Mancha para seguir impulsando las infraestructuras hidráulicas necesarias que garanticen el abastecimiento a los municipios.
Críticas al retraso en las reglas del trasvase
Mercedes Gómez ha denunciado que la ausencia de una propuesta para modificar las reglas de explotación del trasvase Tajo-Segura supone incumplir tanto las sentencias judiciales que motivaron la revisión de los planes hidrológicos como otras resoluciones posteriores que aún no se han ejecutado. Ha recordado que el Gobierno regional ha presentado aportaciones técnicas para avanzar hacia una explotación sostenible del trasvase, adaptada al cambio climático y compatible con las necesidades de abastecimiento, sin que estas hayan sido atendidas.
Según ha explicado, este retraso obligará previsiblemente a aprobar en enero un nuevo triple trasvase con unas reglas “caducas”, al mantenerse los embalses de cabecera en Nivel 2. Esto supondrá autorizar trasvases de 27 hectómetros cúbicos mensuales, a los que se suman 104 hectómetros pendientes del anterior año hidrológico, además de los correspondientes a los meses de octubre, noviembre y diciembre.
Ante esta situación, la consejera ha avanzado que el Gobierno de Castilla-La Mancha tomará las medidas que considere oportunas a principios de año si no se produce la modificación de las reglas, y ha advertido de que no aceptará que esta revisión se posponga hasta 2027.
Un nuevo modelo para los embalses de cabecera
Gómez ha defendido la necesidad de implantar un nuevo modelo de gestión en los embalses de cabecera del Tajo que permita mantener una lámina estable de agua superior a los 400 hectómetros cúbicos actuales, garantizar caudales ecológicos reales y disponer de una reserva estratégica que asegure los abastecimientos, especialmente en un contexto marcado por el cambio climático.
“Cada vez es más necesario contar con garantías para el presente y el futuro de nuestra región”, ha remarcado, insistiendo en que se están perdiendo oportunidades para adaptar la gestión del trasvase a la nueva realidad climática y ambiental.
Rechazo al catálogo de acuíferos compartidos y a los planes de sequía
Durante la reunión del Consejo Nacional del Agua, el Gobierno regional tampoco ha respaldado el catálogo de acuíferos compartidos, al considerar que no existe suficiente información técnica que justifique su existencia, especialmente en cuencas de gran importancia para Castilla-La Mancha como el Júcar y el Guadiana.
Asimismo, la Comunidad Autónoma ha rechazado el proyecto de orden de los planes especiales de sequía, al entender que no se han tenido en cuenta las consideraciones planteadas por el Ejecutivo autonómico para proteger el desarrollo socioeconómico del territorio. En este sentido, la consejera ha criticado el Plan Especial de Sequía del Segura por incorporar recursos procedentes de la cuenca del Tajo, vulnerando el principio de unidad de cuenca establecido en la Directiva Marco del Agua.
“Cada cuenca debe contar con sus propios recursos a la hora de planificar la sequía, y no puede aprobarse un documento que dependa de recursos ajenos”, ha señalado.
Grupos de trabajo para el cuarto ciclo de planificación
Por último, Mercedes Gómez ha destacado la importancia de cumplir y financiar el actual programa de medidas de los planes hidrológicos antes de plantear nuevos compromisos. En este contexto, ha anunciado que a partir de enero se constituirán en Castilla-La Mancha los grupos de trabajo para elaborar las aportaciones a los Esquemas de Temas Importantes del cuarto ciclo de planificación del Tajo (2028-2033), que afecta a siete demarcaciones hidrográficas de la región. El plazo para presentar alegaciones concluirá el 28 de mayo de 2026.
