El creciente absentismo laboral pone en peligro la productividad

Castilla-La Mancha se sitúa como la tercera Comunidad Autónoma con mayores tasas de absentismo tras el fuerte incremento experimentado en el segundo trimestre. Un problema que afecta a la productividad, al coste de las empresas y merma en más de un 3 % el crecimiento del PIB

Entre los grandes problemas con los que tienen que lidiar las empresas tanto públicas como privadas sin distinción de sectores destaca el absentismo laboral. Este se produce cuando el empleado se ausenta de algún acto o función en la empresa por ausencia o retrasos, sean estos justificados o no generando importantes costes a las empresas, al repercutir en la productividad laboral, afectando de rebote al crecimiento de la economía.  
 

En período de crisis, el absentismo tiende a reducirse por el miedo de los trabajadores a perder su empleo. No obstante, en España empieza a repuntar de nuevo de forma preocupante. La tasa de absentismo para el segundo trimestre de 2023 ha alcanzado el 6,7 %, dos puntos básicos más frente a la cifra del primer trimestre.  
 

El año avanza así hacia una de las cifras más altas de absentismo laboral en España tras el 6,8 % registrado en 2022 y el 7,1 % alcanzado en 2020 a raíz de la pandemia.  Estas cifras equivalen en tiempo de trabajo perdido y personas ausentes en torno al 3,2 % del Producto Interior Bruto (PIB). 
 

En cuanto al absentismo por Incapacidad Temporal, el más relevante, la tasa ha sido del 5,2 %, un 0,1 % más tanto en intertrimestral como interanual, mostrando la tendencia al alza de este problema.  
 

Más de 1,1 millón de empleados no trabajaron entre abril y junio 
 

Al analizar la jornada pactada y las horas de absentismo del segundo trimestre de 2023, señala el informe de absentismo y siniestralidad laboral realizado por el Instituto de Adecco Group, se puede concluir que las horas no trabajadas por absentismo equivalen a que 1.108.486 asalariados no trabajaron entre abril y junio. Eso supone un incremento del 2,6 % frente al anterior trimestre y del 5,1 % en tasa interanual. 
 

El País Vasco vuelve a ser la comunidad autónoma española que más sufre este problema al registrar una tasa de absentismo del 8,4%, la más alta de nuevo del país, tras incrementarse un 1,1 puntos interanual. Tras ella se sitúa Canarias, con un 7,4 %, aunque en su caso con un ligero retroceso de 0,2 puntos respecto al mismo trimestre del año anterior. 
 

El tercer lugar en esta lista se sitúa Castilla-La Mancha. La región castellanomanchega ha sufrido una tasa de absentismo laboral del 7,2 % durante el segundo trimestre del año al experimentar un incremento de 0,4 puntos con respecto a abril, mayo y junio del año pasado. En el otro extremo, las menores tasas de absentismo se han dado en Islas Baleares y Andalucía, las únicas comunidades con una tasa de absentismo por debajo del 6 %.  
 

Por sectores, la industria ha sido el más afectado por el absentismo laboral en el segundo trimestre del año con una tasa del 7,1 % tras registrar un incremento interanual de 0,4 puntos. Por detrás han quedado Servicios, un 6,8 %, y Construcción con un 5,1 %. 
 

Para atajar este problema que afecta a la productividad, la mayoría de las empresas llevan años desarrollando planes de seguimiento específicos para sus empleados con el fin de detectar las causas. Tiene un doble objetivo. En primer lugar, trata de identificar motivos de posibles descontentos en la plantilla, tanto si su origen es en el trabajo como fuera de él, para tratar de aportar soluciones a la calidad de vida del empleado en la empresa. 
 

Por otro lado, pretenden evitar que se dispare la tasa de absentismo laboral entre la plantilla que suele tener un alto impacto en las empresas. Estos análisis permiten implementar medidas como la conciliación, horarios flexibles, sistemas de bonificaciones o un trato más humano. 
 

Julio Muñoz es periodista de información económica  y experto en comunicación.