Hayedo de la Tejera Negra, sinfonía de colorido otoñal de la naturaleza

Todos los días al levantarme, mis ojos se encuentran con una fotografía colocada frente a mi dormitorio, una fotografía del Pico Ocejón (2.049 metros) hecha en 1985 por Santiago Bernal  (1927-2021) desde Valverde de los Arroyos, la parte este de la ladera, a la oeste Majaelrayo y Campillo de Ranas. Esa mole gris de pizarra de sus tierras, acabada en perfecto cono triangular, desde cuya cúspide, que he tenido la suerte de alcanzar, se divisa una gran parte  de nuestra provincia, llegando hasta el Señorío de Molina, a su izquierda la Montaña Sagrada del Santo Alto Rey (1.852 metros), donde se encuentra la ermita del Santo Alto Rey siempre abierta para que el caminante y, sobre todo, los pastores que cuidan del ganado puedan refugiarse en ella en los días de frío, lluvia y nieve, afeada por las antenas de televisión situadas en su más próximo entorno.                                                                                                                                                                                                        

La Sierra Norte de Guadalajara, parte de la Sierra de Ayllón (46 kilómetros de longitud), que nos separan de Madrid y Segovia, con el Pico del Lobo (2.274 metros), en El Cardoso de la Sierra, el pico más alto de Guadalajara y de Castilla-La Mancha, cerca la Sierra de Pela que nos limita con Soria, más al sur Tamajón, con sus descubrimientos paleontológicos y el museo donde se pueden admirar un gran parte de ellos. Tamajón con el apellido Bris, que como primero llevamos en España 454 personas y de los que el historiador Aurelio Garcia Lopez en su libro 'Tamajón. En la Edad Contemporánea', relaciona los alcaldes que con el apellido Bris tuvo el municipio: Antonio Bris (1795), Prudencio Bris (1820), José Bris Mayor (1831 y 1834) e Ildefonso Bris y Esteban (1869), comandante del ejército isabelino en la segunda Guerra Carlista y padre de mi abuelo Domingo Bris Castellet.

Admirable la arquitectura de esos pueblos que hicieron sus casas de pizarra (Retiendas, Campillo de Ranas, Campillejo, El Espinar, Roblelacasa, Robleluengo y Majaelrayo ), Arquitectura Negra y el Románico Rural, Santa Colomba de Albendiego, San Bartolomé de Campisábalos (con el tercer aire más puro del mundo), San Pedro Apóstol de Villacadima y, cerca, Cantalojas. En ella, un monumento de la naturaleza: el Hayedo de la Tejera Negra (1.641 hectáreas), declarado -junto con los hayedosde los Cárpatos y los de Montejo de la Sierra (Madrid) y Berzosa (Segovia)- en el año 2017 por la UNESCO Patrimonio de la Humanidad al tratarse de los hayedos más meridionales de Europa.

El Hayedo de la Tejera Negra y dos versiones para su nombre, por sus hayas y por el grupo de tejos oscurecidos situados en el mismo o por el valle a poniente en la cuenca del río Sorbe conocido como Tejera Negra.

En pleno otoño, durante los meses de noviembre y diciembre, el Hayedo de la Tejera Negra se muestra mágico, convirtiéndose en una sintonía de colores, verde, amarillo, rojo de sus árboles, hayas (400 hectáreas), roble, abedul, tejos y acebos en sus zonas húmedas y, en las secas, pino silvestre, serbal y melojo. Un lugar de ensueño con los ríos Lillas (11 kilómetros) y Zarzas, el hayedo en una zona que después de la glaciación de hace 7.000 años, conservó la humedad y el suelo bien drenado y que, además de los ya mencionados, tiene brezos, arándanos, enebros, gayubas… y abundante fauna: águilas reales, milanos reales, azores con sus nidos en las rocas, corzos, tejones, comadrejas, zorros, lobos, jabalíes…

Naturaleza que en otoño se viste de colores, espectáculo que visitan cerca de 15.000 personas al año por la Senda de las Carretas de 10,8 kilómetros y duración aproximada de 2 horas y media, o la Senda del Robledal de 18,9 kilómetros y de 5 a 6 horas de duración. De 2011 a 2015 tuve el honor de ser Presidente del Parque Natural de la Sierra Norte (125.772 hectáreas), en el que se encuentra incluido, desde el año 2011, el Hayedo de la Tejera Negra, aunque había sido ya declarado Parque Natural en 1978. Nunca olvidaré lo que para mí significa su presencia, el conocerlo y, sobre todo, su esencia, el contenido de una naturaleza viva, procedente de una milenaria glaciación, que pervive con fuerza asegurando su futuro.

José Maria Bris Gallego. Funcionario del Estado. Diputado del Congreso con UCD(1979-1982) Senador con el PP (1986-2000) Vicepresidente de la Diputación Provincial (1983-1987) Alcalde de Guadalajara (1992-2003) Diputado Regional (2003-2011)