El Gobierno de Castilla-La Mancha autorizará en los próximos días el adelanto de la cosecha de lavanda tan sólo en aquellas parcelas afectadas por el gusano
El Gobierno de Castilla-La Mancha autorizará en los próximos días el adelanto de la cosecha de lavanda en aquellas parcelas afectadas por el gusano Helicoverpa Armigera en la región, "tal como demandan los productores afectados". Así se lo hizo saber la viceconsejera de la Política Agraria Común y Política Agroambiental, Gracia Canales, a los representantes de la Asociación Nacional Interprofesional De Plantas Aromáticas y Medicinales (Anipam) con quienes mantuvo un encuentro este martes.
La viceconsejera explicó que la Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural ha empezado a recabar los informes técnicos que confirman la presencia de plaga y que van a llevar en los próximos días a la publicación de una resolución que permitirá el adelanto de la recolección en las parcelas afectadas por el gusano "sin penalización en las ayudas que reciben y dando una respuesta rápida y eficaz a este problema".
Sin embargo, desde la Asociación Provincial de Agricultores y Ganaderos consideran que en la reunión del martes "no se ha dado solución" al problema, ya que "se pedía el levantamiento total de la limitación de cosechar el 10/% hasta el 1 de cctubre, y no sólo en las parcelas con afectación de la plaga".
Según afirma la APAG en sus redes sociales el gusano Helicoverpa Armigera -una plaga que se propaga con rapidez por las plantaciones de lavanda- ya está presente en varias parcelas de Guadalajara: "Los técnicos de APAG han visitado estas parcelas y han constatado su presencia y sus consecuencias. Hemos realizado un informe técnico que recoge los detalles, con fotografías georreferenciadas y vídeo. Los productores de aromáticas necesitan apoyo para superar esta situación, igual que los ganaderos en su día afectados por la EHE u otras explotaciones sometidas a adversidades coyunturales".
En el siguiente enlace se puede visualizar el video elaborado por los ténicos de APAG.
El pasado 17 de julio, Anipam ofreció una rueda de prensa en la localidad alcarreña de Cogollor para abordar la crisis causada por la plaga de Helicoverpa Armigera, que amenaza 8.000 hectáreas de lavanda y lavandín. Los productores locales, sorprendidos por esta plaga, mostraron el daño en una parcela próxima a Brihuega, una zona clave para el turismo de lavanda. Destacaron el impacto devastador de la mariposa nocturna, cuyas orugas están destruyendo los tallos y espigas florales, y resaltaron la urgente necesidad de medidas de apoyo y recursos para combatir la plaga y proteger la producción.
El sector atraviesa una crisis profunda, con tres años sin vender esencia, crisis de precios produciendo a pérdidas, y exclusión de las ayudas de sequía del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, a pesar de ser uno de los cultivos más afectados.
Abelardo Carrillo, presidente de Anipam, destacó la falta de apoyo y rentabilidad para los agricultores, a pesar de la riqueza que genera la lavanda. "La lavanda crea riqueza para mucha gente, menos para los agricultores. La base de la riqueza es el cultivo, y este se nos muere por plagas, falta de rentabilidad y falta de apoyo". Los productores han esperado meses una respuesta de la Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo. Ante la presión y la carta enviada desde Anipam, se confirmó la reunión con el consejero -que es la que se ha celebrado esta semana sin la presencia del máximo responsable del área- en la que se ha solicitado la autorización para una siega inmediata, adelantándose a la fecha del 1 de octubre de las ayudas agroambientales.
También intervinieron Lorena Tirado, presidenta de la Asociación Paisajes de Brihuega, y Juan José Laso, presidente de APAG quienes, en la misma línea, pidieron duplicar las ayudas a la lavanda para evitar el abandono de las plantaciones el próximo año y un trasvase de fondos desde los sectores turísticos hacia los productores. "Animo a las administraciones y especialmente a la Consejería de Agricultura a luchar por sus agricultores; está muy bien vestirse de blanco y venir en pleno mes de julio a hacerse una foto en la lavanda, pero hay que trabajar todo el año".
Desde los sectores afectados se ha realizado un llamamiento "urgente" a la acción "para salvar las plantaciones, proteger la economía local y asegurar el futuro de los agricultores".