Ramas y árboles caídos, cableado eléctrico y mobiliario urbano afectados y una pieza de un monolito a punto de caer, tuvieron en jaque a los Bomberos. Afortunadamente no se produjeron daños personales
El vendaval de viento y lluvia que se desató en la noche de ayer en Guadalajara capital se ha dejado sentir con fuerza en las calles de la ciudad, con numerosos destrozos, especialmente en árboles y mobiliario urbano.
El Decano de Guadalajara se ha puesto en contacto con el Servicio de Emergencias 112 de Castilla-La Mancha, desde donde confirman que se produjeron bastantes incidentes relacionados con la caída de árboles y ramas y destrozos en el mobiliario urbano. Los Bomberos realizaron numerosas salidas, todas ellas para retirar obstáculos de la calzada.
Las incidencias más relevantes fueron las caídas de árboles en el paseo del Doctor Fernández Iparraguirre y en el parque de la Concordia; un árbol completamente torcido en la plaza de España; ramas y árboles caídos en la calle Salvador Embid y Segundo Pastor y en general por toda la ciudad; la caída de cableado eléctrico en la calle Trafalgar y la existencia de la pieza de un monolito que estuvo a punto de caer a la vía en la avenida de Francia.
Afortunadamente no se registraron daños personales.
Según la información facilitada por el Ayuntamiento de Guadalajara, la Policía Local y los Bomberos de Guadalajara, así como las Brigadas de Jardines, han atendido hasta 26 incidencias.
Según los valores de la estación meteorológica de Guadalajara el viento sopló con rachas máximas de 76.32 km/h cuando se inició la tormenta.
El Decano les ofrece algunas de las imágenes de los destrozos causados por el vendaval de viento y lluvia.