EDITORIAL. Anónimos, bulos y cinismo

Esta semana ha corrido como la pólvora en redes sociales la fotografía de un cartel en el que se alerta de la falta de personal en el Hospital Universitario de Guadalajara, advirtiendo sobre la consiguiente repercusión en la calidad asistencial y en las listas de espera. 

Es lógico que haya causado alarma entre la población, ya que la Sanidad es uno de los pilares sobre los que sustenta el estado de bienestar. 

Lo que ya no es tan lógico y levanta sospechas es que el escrito es un ANÓNIMO, que ha ‘aparecido’ en varios centros hospitalarios de la región. El mismo en todos los centros, con el mismo mensaje alarmista y las mismas cifras de despidos: 50 médicos y 50 enfermeros y enfermeras. Da igual que sea en Guadalajara, Toledo, Talavera o Cuenca.  

No se sabe de quién ha partido la idea. Los sindicatos niegan su autoría. La oposición da la callada por respuesta. Nadie se responsabiliza y, aún así, los castellanomanchegos han compartido a diestro y siniestro la fotografía. Lamentablemente, las redes sociales se han convertido en el mejor espacio para la difusión de bulos, noticias falsas creadas sobre temas de interés o de actualidad para generar alarma social o atraer la atención del mayor número de usuarios posibles. Y este anónimo es un bulo en toda regla.

Quien, intencionadamente, ha provocado tanto revuelo entre la opinión pública ha logrado su objetivo. Prácticamente al minuto uno, el Gobierno regional, a través de su consejero de Sanidad, salía a los medios de comunicación para desmentir este mensaje: "Estos mensajes, anónimos y sin firmar, son absolutamente falsos", afirmaba. 

 

Explicaba que han concurrido tres circunstancias que explican el cese de personal sanitario en este momento: un concurso de traslados que está movilizando a casi 8.000 personas; la vuelta a la normalidad tras las vacaciones del periodo estival y el cese de sustitutos, y la finalización de la formación de los especialistas este mismo mes, que ahora tienen la posibilidad de pedir plaza para los próximos tres años.

 

Todo ello ha generado un desajuste en materia de personal que se irá solucionando en las próximas semanas, por lo que se pide paciencia a los usuarios y a los trabajadores. 

 

El Gobierno de Castilla-La Mancha ha decidido combatir la desinformación que circula en materia sanitaria a través de una nota informativa en la que se niega la mayor y se recuerda que la región tiene el mayor presupuesto y el mayor número de profesionales sanitarios de la historia: 38.000, cerca de 12.000 más que en 2015. 

 

A pesar de estas cifras, es cierto que la Sanidad en Guadalajara y en Castilla-La Mancha tiene mucho que mejorar. Todos, de una u otra manera, nos vemos afectados por las listas de espera, por la no cobertura de vacantes en los centros de salud o por la demora en las citas en Atención Primaria. 

El sistema sanitario adolece de muchas carencias, la mayoría derivadas de la agresiva política de recortes del PP en la legislatura de Cospedal, que se pusieron en evidencia en la etapa del Covid y de las que todavía nos estamos recuperando.

Lo cierto es que el Ejecutivo de Emiliano García-Page está haciendo lo imposible por sacar adelante el erial en que quedó convertida la sanidad en la etapa de ‘Doña Cospe’.

En sus cuatro años de Gobierno, recortó más de 3.000 profesionales en la sanidad pública -420 de ellos en Guadalajara- y redujo la inversión en 2.000 millones de euros. A ello hay que sumar el cierre de cerca de 700 camas en los hospitales de la región, la no convocatoria de ninguna oferta de empleo público, el recorte en un 3,8% del salario de los profesionales sanitarios y la instauración del copago, que afectó especialmente a los colectivos más desfavorecidos y a los pensionistas. Las  listas de espera aumentaron, se paralizó la construcción de los nuevos hospitales de Guadalajara y Toledo y se planteó la llamada colaboración público-privada en la atención sanitaria y en las residencias de mayores. Vamos, lo que se viene llamando privatización. Pura y dura. 

 

La señora Cospedal, a la que -afortunadamente- no hemos vuelto a ver por estas tierras, ejecutó los mayores recortes en sanidad de toda España y al Gobierno socialista de Page le está costando sangre, sudor y lágrimas paliar esta situación. 

 

Por ello, resulta sonrojante la campaña iniciada por el PP de Castilla-La Mancha para desprestigiar la gestión sanitaria de la Junta de Comunidades. Los populares se desgañitan en los medios de comunicación y en las tribunas públicas ensañándose y alarmando aún más al personal. Desde su presidente regional, Paco Núñez -que apodaremos como ‘El Niño de Cospedal’ porque fue su principal valedora- hasta la diputada regional del PP por Guadalajara Itziar Asenjo -’La chica de Paco’- quien, en un descarado ejercicio de cinismo ha ofrecido una rueda de prensa- oportunista que no oportuna- para criticar al PSOE. Y lo ha hecho a las puertas del Hospital Universitario, ese que su ‘jefa’ abandonó y dejó en coma profundo sin despeinarse. 

 

Un poquito de por favor, que de aquellos polvos vienen estos lodos.