Un espectáculo bochornoso

El Partido Popular de Guadalajara no ha empezado el año con buen pie. O con buen brazo podríamos decir. El que se le ha escapado al realizar el saludo franquista al portavoz del PP en el Ayuntamiento de Cabanillas del Campo y ex alcalde de la localidad, Jaime Celada, en el transcurso del vermú de Nochevieja celebrado en el restaurante Bureo de la capital. 

El lunes, la redes sociales ardían con las imágenes grabadas por uno de los asistentes a esta celebración, en la que se puede ver cómo algunos de los clientes e incluso alguna camarera del local, cantan a grito pelado el himno falangista ‘Cara al Sol’, brazo en alto, realizando el saludo fascista, entre ellos el citado concejal. Un vídeo de apenas 30 segundos que lleva cientos de miles de reproducciones, retweets y comentarios en Twitter y Facebook y que no puede calificarse de otra forma más que de bochornoso.  

Jaime Celada ha demostrado una torpeza soberana. No es de recibo que un representante político de un partido democrático realice públicamente el que la Falange Española llamaba ‘saludo íbero’, ni que se desgañite con la letra de un himno que el fascista José Antonio Primo de Rivera, adoptó para esta formación totalitaritaria, antidemocrática, ultranacionalista y en la más extrema de todas las derechas. 

Celada está haciendo un flaco favor a su partido a cinco meses de las elecciones. Ya no esconde su perfil radical a pesar de que en noviembre compartía orgulloso una fotografía junto al líder nacional del PP, Alberto Nuñez Feijóo, durante una visita cursada a Guadalajara, y que estos días también está circulando en redes sociales y medios de comunicación para poner cara a tan demócrata afiliado, precisamente en un momento en que su jefe de filas está haciendo no pocos equilibrios para ofrecer un perfil más moderado y alejarse de los posicionamientos de los ultraderechistas de Vox. Pues mira por dónde, tiene a un radical en sus filas.

Tres días después de que el vídeo corriera como la pólvora, incluso en medios nacionales, el presidente del PP en Castilla-La Mancha, Paco Núñez, anunciaba que el Comité de Dirección del PP-CLM, celebrado el martes, decidía abrir un expediente informativo para analizar lo sucedido y ponía el caso en manos del Comité de Derechos y Garantías del PP, que será el que determine el futuro del ex alcalde de Cabanillas en el partido. Núñez, en un ejercicio de responsabilidad política que le honra, se quitaba el problema de encima de un plumazo: “Este afiliado no puede representar al Partido Popular”, afirmaba rotundo.

Por su parte, Unidas Podemos, con el respaldo del Foro por la Memoria de Guadalajara, registró el mismo día un escrito en la Subdelegación de Gobierno para poner en conocimiento de la Secretaría de Estado de Memoria Democrática (SEMD) los hechos que se recogen en este vídeo para que el Gobierno de España tome medidas, al considerar que puede constituir un delito contra la Ley de Memoria Histórica, que en su artículo 38 contempla este tipo de infracciones contra las víctimas del Franquismo, y que conllevarían penas de multa a determinar la Fiscalía de Memoria Democrática, cuya creación se prevé para la próxima primavera. Este artículo de la nueva Ley apunta que “sin perjuicio de derecho de reunión pacífica y sin armas, regulado por la Ley Orgánica 9/1983, de 15 de julio, reguladora del Derecho de Reunión, se considerarán actos contrarios a la memoria democrática la realización de actos efectuados en público que entrañen descrédito, menosprecio o humillación de las víctimas o de sus familiares, y supongan exaltación personal o colectiva, de la sublevación militar, de la Guerra o de la Dictadura, de sus dirigentes, participantes en el sistema represivo o de las organizaciones que sustentaron al régimen dictatorial”.

A pesar de que el PP de Castilla-La Mancha ha abroncado a Jaime Celada por sus manifestaciones públicas a favor del fascismo, nadie, absolutamente nadie del partido en Guadalajara, se ha pronunciado públicamente para afearle ni reprocharle su conducta. ¿Dónde está ahora la diputada regional, miembro del Comité de Dirección de Guadalajara, coordinadora general del PP en la región y vicepresidenta de las Cortes de Castilla-La Mancha, Ana Guarinos? ¿Por qué el presidente provincial del partido, Lucas Castillo, todavía no ha dicho esta boca es mía? ¿A qué esperan los diputados nacionales y senadores populares por la provincia para salir a la palestra y condenar la actitud de su afiliado? ¿No tienen nada que decir sus compañeros de filas en Cabanillas ni en Guadalajara capital? 

Como dice el refrán, “Quien calla, otorga”. Pues eso.