Bustares también recibió a los Reyes Magos

La localidad serrana recibió con ilusión a Melchor, Gaspar y Baltasar en la mañana del ayer, día 6

A pesar de la lluvia del fin de semana, Guadalajara dio una calurosa bienvenida a los Magos de Oriente. Las previsiones de mal tiempo no fueron óbice para que miles de personas acudieran -en masa- a alguna de las cabalgatas que se programaron en la provincia.

La capital, Azuqueca de Henares o Sigüenza fueron una muestra de los emplazamientos en los que Melchor, Gaspar y Baltasar se dejaron ver para repartir regalos, caramelos e ilusión entre la ciudadanía. Pero, sobre todo, a los más pequeños, que no daban crédito. Nunca se habían imaginado poder estar tan cerca de los monarcas. Sólo hay que revisar los videos existentes en las redes sociales para comprobar la emoción que les generó divisar a la comitiva regia.

La mayoría de estos desfiles tuvieron lugar el pasado domingo, 5 de enero, en horario vespertino. Sin embargo, no todas las localidades recibieron a Sus Altezas en esa fecha. Existieron pueblos que acogieron a los Reyes al día siguiente, el lunes -6 de enero- por la mañana. Fue el caso de Bustares, una población ubicada a los pies de la sierra del Alto Rey, a 1.300 metros de altitud. Aquí, los reyes -acompañados por sus respectivos pajes- aparecieron en la plaza Mayor bustareña. Y a diferencia de la jornada anterior, el tiempo los respetó. Disfrutaron de una visita fresca, pero soleada.

Una vez en este pueblo serrano, participaron en la misa de Epifanía. Tras los Santos Oficios, salieron de la parroquia y se sentaron en un lugar de honor, junto a su séquito. Más concretamente, en la puerta principal del complejo eclesial, un acceso compuesto por varias arquivoltas que habla del origen medieval del templo. Este monumento -perteneciente al Románico Rural- se comenzó a construir en el siglo XIII. ¡Hace 800 años! Pues en ese mismo espacio, y contemplados por más de ocho siglos de historia, Melchor, Gaspar y Baltasar -junto a sus acompañantes- se sentaron para poder repartir los regalos entre los presentes. Decenas de vecinos de Bustares se dieron cita en el mismo punto, para recibir los presentes que les traían desde Oriente.

Hubo risas, alegría y -sobre todo- mucho buen humor. Allí estuvieron los bustareños hasta que se entregaron la totalidad de los presentes y se pudo despedir al séquito real. Tras ello, la concurrencia tuvo la oportunidad de dirigirse al bar, para tomar el tradicional vermú de mediodía. Sin duda, un broche de oro para unas navidades en las que en Bustares se han impulsado una sucesión de eventos. Entre los mismos, destacaron desde una ronda navideña, hasta la toma de las uvas de fin de año, pasando por la degustación popular de roscón o la mencionada distribución de regalos. Unas propuestas que han sido organizadas por la asociación cultural La Hincadera, el Ayuntamiento de la localidad y la parroquia de San Lorenzo.