Antes de Navalcarnero, parte 3: El renacer morado

El ascenso más reciente, a Segunda RFEF, sentó las bases del proyecto que cada vez está más cerca de hacer del Dépor un equipo de bronce

Tras varios años de travesía por la Tercera División, el Deportivo Guadalajara inició una nueva etapa en la temporada 2021-2022 con ilusiones renovadas y una propiedad distinta al frente del proyecto. Con la reestructuración de las categorías del fútbol español, los alcarreños compitieron en el Grupo XVIII de la recién creada Tercera RFEF, y lo hicieron con paso firme desde el principio.

La regularidad del equipo y el buen hacer de Gonzalo Ónega desde el banquillo se tradujeron en una campaña brillante que culminó el 23 de abril de 2022. Aquella tarde, el Dépor rubricó el ascenso a Segunda RFEF y el título de campeón de grupo con una contundente victoria por 0-3 en el campo del CD Tarancón. Con 76 puntos en su casillero final, fruto de 23 triunfos, 7 empates y solo 3 derrotas, el club sellaba el regreso al cuarto escalón del fútbol nacional.

El estreno en la nueva categoría llegaría meses después, el 4 de septiembre, con una derrota en tierras extremeñas ante el Coria. Sin embargo, la reacción fue inmediata y en la segunda jornada llegó la primera alegría para la afición morada: un sólido 3-1 frente a la UD Montijo.

Ese curso 2022-2023 también quedaría marcado por una Copa del Rey histórica. El Dépor superó por primera vez una eliminatoria frente a un rival de superior categoría, imponiéndose por 2-1 a la SD Ponferradina, de Segunda División. Ese hito le permitió vivir una noche para el recuerdo enfrentándose a un Primera, el Elche CF, en el Pedro Escartín. Aunque los ilicitanos se llevaron el partido (0-3), el choque supuso el mejor papel del club en el torneo copero hasta la fecha y el regreso del fútbol de élite a Guadalajara.

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