La Guardia Civil de Guadalajara ha incautado este fin de semana 135 kilos de níscalos (lactarius deliciosus) y ha denunciado a tres personas por recogida ilegal de setas en varias intervenciones desarrolladas este fin de semana en el término municipal de Cogolludo.
Cabe recordar que el Ayuntamiento de Cogolludo cuenta con el único punto de la provincia donde se puede llevar a cabo la compra-venta para grandes mayoristas y pequeños consumidores. Para ello, es necesario cumplir una serie de requisitos exigidos por el Consistorio: los recolectores deben estar dados de alta en la Seguridad Social o ser autónomos, deben tener el certificado de Manipulador de Alimentos y han de firmarse albaranes de entrega que certifiquen la procedencia de los ejemplares y el control sanitario de los mismos.
El control lo realiza el propio Ayuntamiento y, en caso de detectarse alguna irregularidad, actúa la Guardia Civil requisando los ejemplares y adoptando las medidas sancionadoras correspondientes.
Las lluvias de las últimas semanas y las temperaturas suaves con ausencia de heladas que se han disfrutado estos días se han dejado notar en los montes de la provincia donde proliferan los buscadores de setas. De hecho, a principios de noviembre los Agentes Mediomabientales de Castilla-La Mancha ya informaban en sus redes sociales que habían decomisado más de 150 kilos de setas recolectadas ilegalmente en diferentes montes públicos del Parque Natural de la Sierra Norte de Guadalajara. Las numerosas cajas con níscalos decomisadas eran entregadas a los respectivos ayuntamientos propietarios de los montes donde fueron recolectados.
La Delegación de Desarrollo Sostenible y la Subdelegación del Gobierno, se reunían de manera previa al inicio de la temporada para establecer un operativo de control y vigilancia para velar por el cumplimiento de la norma y evitar el furtivismo en el que participan efectivos de la Guardia Civil, el Seprona, el Cuerpo de Agentes Medioambientales y el servicio de Medio Natural.
Según la información facilitada a El Decano por la Oficina de Comunicación de Guardia Civil de Guadalajara, en la temporada de 2022, a pesar de que fue una de las peores que se recuerdan, el dispositivo especial contra la recogida ilegal de setas se incautó de más de dos toneladas de hongos en la provincia, en actuaciones llevadas a cabo, entre otras localidades, en Humanes, Hita, Torija, Cogolludo, Valdesotos y Brihuega. Fueron identificadas cerca de una veintena de personas.
El Gobierno de Castilla-La Mancha aprobó en 2016 una orden mediante la cual se regula la recogida de setas en toda la región. Esta normativa, entre otras cuestiones, limita a cinco los kilos que se pueden recolectar por persona y día para autoconsumo y sin ánimo de lucro y establece las setas silvestres recolectables, un total de 24 que se corresponden con especies comestibles y destinadas a consumo propio, usos medicinales, científicos, divulgativos y educativos.
Además, establece que solamente se podrán coger los ejemplares que hayan alcanzado su tamaño normal de madurez, respetando los ejemplares pasados, rotos y alterados y los que se encuentran en sus primeras fases de desarrollo. Las setas recolectadas por error o alteradas, deberán dejarse en el terreno, en su posición natural.
En cuanto a los recipientes utilizados para la recolección y el traslado de las setas por el monte se aconseja utilizar aquellos que permitan su aireación y la caída al exterior de las esporas. Se recomiendan las cestas de mimbre o envases porosos. Las herramientas utilizadas serán navajas y cuchillos.
Está totalmente prohibido remover el suelo de forma que se altere o perjudique el mantillo del terreno; usar cualquier herramienta apta para el levantamiento indiscriminado de mantillos o capas superficiales del suelo forestal, tales como hoces, rastrillos, escardillos y azadas; la recogida durante la noche; el uso de bolsas y cubos de plástico para transportar las setas y la recolección de ejemplares extramaduros, pasados o en descomposición.
Por razones de protección o conservación del recurso y en zonas o caminos de determinados montes, podrán establecerse, con carácter excepcional, limitaciones temporales al tránsito de personas, animales o vehículos. Estos últimos deberán circular únicamente por las pistas forestales.
Y, por último, se recuerda que el incumplimiento de las normas de recolección conlleva el decomiso por parte de los agentes de la autoridad de los productos ilegalmente obtenidos. Las sanciones, sujetas a la Ley de Montes y Gestión Forestal Sostenible de Castilla-La Mancha, oscilan entre multas de 100 euros por infracciones muy leves al millón de euros para los casos extrema gravedad.
Para poner coto a esta actividad ilegal y evitar la devastación y los destrozos en los bosques de la provincia, así como para velar por la seguridad de las personas que recogen setas sin ánimo de lucro, se están instalando puestos de seguridad en puntos estratégicos, especialmente en los cruces de caminos y en las zonas más frecuentadas por los recolectores ilegales.