El Diario Oficial de Castilla-LaMancha ha publicado la resolución de la Delegación de Desarrollo Sostenible de Guadalajara por la que se desestima el nuevo proyecto de mina en Naharros, pedanía de La Miñosa, en la Sierra Norte de Guadalajara, denominado Sierra Bajera, por considerarse “inviable desde el punto de vista ambiental”.
Desarrollo Sostenible asegura que, de llevarse a cabo la nueva mina, se verían seriamente afectados los valores paisajísticos y los recursos geomorfológicos, botánicos y faunísticos de la zona, como son bosques de roble melojo, vegetación casmofítica, matorrales mediterráneos, subestepas de gramíneas, prados silíceos y brezales secos. Respecto a la fauna, se destaca la presencia de especies amenazadas como el aguilucho pálido, el águila real, el roquero rojo, el lobo, la lagartija colilarga y el tejón.
La resolución toma en cuenta que la empresa solicitante, Cuminer, dispone de alternativas para continuar su actividad en la mina El Picacho, actualmente en funcionamiento, y en El Peñascal, donde no ha comenzado la explotación. Asimismo, estima que su impacto se habría visto agravado por la acumulación con los proyectos existentes ya citados.
Ecologistas en Acción celebra esta decisión, puesto que, tal y como señala en un comunicado de prensa, la mina de Sierra Bajera cuenta con un alto rechazo social, tanto vecinal como de colectivos ecologistas, que han presentado numerosas alegaciones y han realizado movilizaciones de protesta, en las que han participado la Asociación Salvemos Naharros y su Serranía, la Asociación Serranía de Guadalajara, la pedanía de Naharros, el Grupo Local de WWF España y Ecologistas en Acción Guadalajara.
En este sentido, explican que de haberse realizado, Naharros se habría visto totalmente rodeado por tres frentes mineros, todos a corta distancia del núcleo urbano, lo que habría perjudicado seriamente la salud de los vecinos, que habrían tenido que respirar polvo de sílice potencialmente cancerígeno. En concreto, Sierra Bajera se encuentra a una distancia de tan solo 900 metros.
La nueva mina, además, habría afectado a diversos proyectos con interés medioambiental y social de la propia Junta de Castilla-La Mancha, como son la declaración del Parque Natural Sierra Norte, la candidatura del paisaje dulce y salado de Sigüenza y Atienza a Patrimonio Mundial, o el programa para que los antiguos pozos mineros de Hiendelaencina se abran al público.
También indican que hay que recordar que Cuminer S.A., que cuenta con 40 años de actividad en la zona, no ha cumplido con su obligación de restaurar la zona afectada por la mina que está en explotación.