“De Castilla-La Mancha, el cielo”, es el lema con el que la Junta de Comunidades está promocionando la región en la Feria Internacional de Turismo (Fitur), que se celebra esta semana y hasta mañana, 26 de enero, en el recinto ferial de Ifema en Madrid. Se trata de un tema en el que Guadalajara tiene mucho que decir, porque la baja densidad de población y la escasa contaminación de sus zonas rurales le otorgan uno de los cielos más limpios y oscuros para el astroturismo, reconocidos en 2022 como Reserva Starlight, uno de los máximos reconocimientos de la Fundación del mismo nombre y de los de mayor extensión de cuantos han obtenido esta declaración.
De esta manera, la Diputación Provincial ha querido dar una importancia especial al astroturismo en Fitur 2025, con una fecha muy importante en el horizonte para todos los amantes de la astronomía: el 12 de agosto de 2026, cuando tendrá lugar el próximo eclipse total de sol, que prácticamente sólo será visible en la franja norte de la Península Ibérica.
Guadalajara está presente un año más en la feria, dentro del stand de Castilla-La Mancha, localizado en el pabellón 7 de Ifema, con el lema “Guadalajara, más de lo que imaginas” y este domingo, 26 de enero, tendrá un protagonismo especial, ya que el Día de Guadalajara clausura FITUR 2025.
El objetivo ahora está claro, Guadalajara tiene un año y medio para convertirse en el destino de referencia para disfrutar de este fenómeno.
Este excepcional acontecimiento, que no se ve en España desde agosto de 1905 y que habrá que esperar otros 300 años para que vuelva a suceder, es sin duda una oportunidad para poner esta provincia en el mapa y dinamizar la Guadalajara más rural pero, tal y como señala Pablo García Lario, miembro de Astroguada y astrónomo de la Agencia Espacial Europea, además de uno de los promotores de la declaración de la Reserva Starlight Cielos de Guadalajara, también supone un reto muy importante, a la hora de preparar todos los recursos y la logística necesaria , tanto de infraestructura turística, como de seguridad, para recibir a los miles de visitantes que se desplazarán para disfrutar del espectáculo.
“Es un desafío para todas las administraciones que se van a tener que organizar, porque necesitamos que la gente acuda ordenadamente a todos los lugares de observación”, valora el astrónomo. Esto exige la coordinación de las autoridades locales y provinciales, de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha y el Gobierno central “para garantizar entornos seguros donde observar el eclipse, capaces de acoger a cientos de miles de personas y para eso necesitamos varios sitios elegidos estratégicamente en el territorio, que estén dotados de todo aquello que necesita una aglomeración de gente de estas características: servicios sanitarios, de emergencia, etc. Además, no podemos permitir que se acumule un gran volumen de gente en lugares protegidos como parques naturales o reservas”, afirma.
Los eclipses de sol suceden, en palabras de García Larios, “por una casualidad astronómica excepcional. Y es que el tamaño aparente de la luna, que está aquí al lado, a solamente 300.000 kilómetros de distancia y el del sol, que está a 150 millones de kilómetros, llegan a ser muy similares vistos desde la Tierra. Entonces, ocasionalmente, en su discurrir alrededor de nuestro planeta, la luna se sitúa entre el sol y la Tierra y oculta al sol por un periodo de tiempo muy pequeño, en el que el oscurecimiento puede ser total, ocasionando un fenómeno visualmente muy atractivo que atrae a millones de personas. Además, afectan a una zona muy pequeña de la superficie del planeta Tierra y cada vez le toca a una zona diferente. A veces, los eclipses ocurren en zonas totalmente despobladas o en el interior del mar. Esta vez hemos tenido suerte y tendrá lugar en una franja importante del territorio de la Península Ibérica. Luego tenemos los eclipses lunares en los que es la Tierra la que se interpone entre el sol y la luna y lo que vemos es la sombra de la Tierra en la luna”, explica el experto.
La zona de nuestro país que va a ser recorrida por la sombra del eclipse es una franja estrecha de unos 150 km. que va desde Asturias a Castellón, pasando por la España más despoblada: “La Reserva Starlight Cielos de Guadalajara da la casualidad de que es la zona más cercana a Madrid y al aeropuerto de Barajas, que probablemente será el más utilizado por los visitantes que vengan del exterior. Otro aspecto muy importante es que en Madrid el eclipse no va a ser total y, si cualquiera de los siete millones de madrileños tiene interés en este evento astronómico, sólo tiene que coger la A-2 hasta la Reserva Starlight para poder observarlo”. Además, recuerda el astrónomo, los cielos de esta Reserva Starlight tienen una mayor probabilidad de atardecer despejados ese día .
Recientemente, tenía lugar una reunión en la Diputación Provincial con los distintos agentes implicados para ir asentando los cimientos de esta senda, hasta llegar a ese 12 de agosto, que el próximo año caerá en miércoles.
“Los que conocemos este fenómeno desde el punto de vista técnico, astrónomos profesionales y amateur estamos intentando ayudar a la Administración para que sea consciente de lo que viene; lo organice adecuadamente y sea un éxito, pero también puede ser un desastre. Es una oportunidad para el fomento del astroturismo como una vía de desarrollo económico sostenible para la España despoblada y si sale bien la gente querrá volver”
El eclipse tendrá lugar a las 20.30 horas y durará tan sólo 1,40 minutos, pero luego brindará la oportunidad a los visitantes de disfrutar de las Perseidas “en nuestros cielos oscuros, de primera línea, reconocidos como Reserva Starlight”, comenta.
“Estoy convencido de que vendrá gente de todas las partes del planeta exclusivamente a disfrutar del evento y de hecho ya, a fecha de hoy, casi todos los alojamientos están reservados desde hace meses”, comenta García Lario.
La plataforma Eclipse 262728 recoge algunas de las singularidades de este fenómeno, el primero que se va a poder observar en la península en los últimos 120 años. Concretamente, será visible en España, el Ártico, Groenlandia, una pequeña parte de Islandia, el Océano Atlántico y en un área muy pequeña en el norte de Portugal. La totalidad del eclipse, señalan, "ocurrirá en una altitud muy baja (menos de 8 ° en toda España), por lo que un horizonte libre de edificios, árboles, montañas, etc., es fundamental para observar la totalidad", que tendrá lugar en torno al atardecer.
En este sentido, García Lario apunta que no todos los lugares que en otros momentos pueden ser idóneos para la observación astronómica van a ser adecuados para ver el eclipse y es necesario identificar esos espacios que puedan reunir las condiciones necesarias en la provincia de Guadalajara.
En esta primera reunión de los agentes implicados, explica García Lario, se ha establecido una estrategia inicial “y ahora lo que toca es contactar con las administraciones locales, con alcaldes y representantes de los municipios, que son los que tienen un mejor conocimiento del territorio, para elaborar un catálogo con todas las posibilidades y para poder valorar la idoneidad de esos sitios y la capacidad que tienen las administraciones de proporcionar esa infraestructura necesaria (…) Necesitamos identificar cuanto antes esos lugares, porque cuanto antes sepamos dónde vamos a querer que la gente se concentre para que tenga una observación satisfactoria y segura, antes podemos garantizar que la organización va a ser un éxito”.
El profesional de la Agencia Especial Europea enumera algunos de los requisitos que tienen que reunir esos espacios: “ Al ser a última hora de la tarde necesitas que en el horizonte oeste no haya ningún obstáculo. Por ejemplo, no va a ser posible, casi con toda seguridad, observar el fenómeno dentro de una población grande, por lo que habrá que salir un poco fuera para que no haya obstáculos arquitectónicos y habrá que cerciorarse que no haya una cadena montañosa en el oeste”. En este sentido, los puntos elevados, como las cimas de montañas o cordilleras, pueden ser lugares muy propicios para observar este fenómeno.
Por otro lado, el hecho de que el sol esté tan bajo ofrece oportunidades a los aficionados a la astrofotografía para obtener “postales memorables del sol eclipsado con un castillo o un lugar emblemático de la zona. Imagino que esos lugares serán frecuentados por los que quieren obtener una imagen de postal maravillosa que quedará para la posteridad”.
El astrónomo no descarta la posibilidad de que el eclipse pueda coincidir con un día nublado , pero “para poder tener la opción de observarlo hay que estar allí y tener suerte”. No obstante, las estadística meteorológica parece estar de nuestro lado: “Teniendo en cuenta la meteorología y el porcentaje de cielos cubiertos de los últimos 20 años, hay más de un 70% de posibilidades en la provincia de Guadalajara de que pueda observarse el eclipse sin mayor dificultad”. En todo caso, y aunque el cielo esté parcialmente nublado o nublado, el 12 de agosto de 2026 se percibirá la sensación de oscurecimiento del cielo.
Otro de los aspectos importantes a tener en cuenta, a la hora de organizar este evento, es la información sobre las medidas de protección necesarias para poder observar este fenómeno sin riesgo de dañar la visión, “con las gafas solares adecuadas y las medidas oportunas”. Las Administraciones, añade, también “tienen que ponerse las pilas y empezar a pensar en poder proporcionar este material a la población, por ejemplo, con la información adecuada a través de los centros educativos”.
“Hay un montón de trabajo y consideraciones que hacer para conseguir, entre todos, que este fenómeno tan especial sea una experiencia memorable y un éxito que pueda repercutir en el desarrollo del astroturismo en particular y también en la formación de vocaciones STEM en las áreas de ciencias y tecnológica, porque es una oportunidad también para hacer divulgación. Además, una experiencia de este tipo es inspiradora, porque te hace reflexionar sobre muchos aspectos relacionados con el cuidado del medio ambiente y con el hecho de que vivimos en el cosmos y estamos en manos de la Ley Universal de Newton, porque esto no es más que una consecuencia de que las masas que componen la Tierra, la Luna y el Sol orbitan unas alrededor de las otras y en su orbitar aparentemente sin control, se dan estas circunstancias que nos hacen recordar quiénes somos, dónde estamos y el universo en el que vivimos”, concluye.