Claro como el agua

Publicado por: El Decano
04/11/2022 03:17 PM
Reprods.: 17

Esta semana hemos asistido al enésimo capítulo de la llamada ‘Guerra del agua’ a raíz de la presentación por parte del Partido Popular de una enmienda a los Presupuestos Generales del Estado por la que se pide, textualmente, “dejar sin vigencia los cambios introducidos por el Real Decreto 638/2012”. Esto supone en la práctica la eliminación de las nuevas normas de explotación del trasvase Tajo-Segura aprobadas el pasado mes de julio, que reducían el máximo trasvasable de los 38hm3 a sólo 27 hm3 cuando los embalses de cabecera estuvieran en Nivel 2. 

De salir adelante, la enmienda del PP supondría la vuelta al Memorándum aprobado en 2013 por el Gobierno del PP, con el voto favorable de la entonces presidenta de Castilla-La Mancha, María Dolores Cospedal, y de los presidentes de las comunidades de Valencia, Extremadura, Madrid y Murcia. El Memorándum supuso una traición a esta tierra, con el beneplácito de la entonces lideresa popular, porque prácticamente secaba el Tajo y dejaba convertidos en depósitos de cieno los pantanos de Entrepeñas y Buendía. 

En 2020,  se firmó el Acuerdo en Defensa del Agua de Castilla-La Mancha, fruto del consenso y el entendimiento de todos los partidos con representación en las Cortes, agentes sociales y económicos y más de cuarenta entidades de la comunidad autónoma. Un texto en el que se ponen por delante los intereses de la cuenca cedente frente a la receptora y en el que los firmantes se comprometían a defender los intereses de la región en materia de agua. Recordemos que el presidente regional del PP, Paco Núñez. estampó su rúbrica en este documento. 

El presidente nacional de los populares, Alberto Núnez Feijoó, visitaba el jueves Guadalajara y recalcaba que “el agua necesita pactos y no guerras”, añadiendo que “la cuenca cedente tiene que tener prioridades para el agua” y apostando por un pacto nacional como “prioridad para todos los partidos políticos”. En la misma línea se pronunciaba Paco Núñez  y también lo hacía el senador popular, Antonio Román. Preguntado por este medio sobre si estaría dispuesto a romper la disciplina de voto en defensa de los intereses de Guadalajara, aseguraba rotundo: ”Yo lo que haré siempre es lo que me dicte mi conciencia, defender los intereses de Guadalajara y tratar de llegar a acuerdos con mi partido y fuera de él para conseguir lo mejor para mi tierra”. 

Después de escuchar a los líderes populares habría que lanzarles entonces una pregunta: ¿Por qué apoyan esta enmienda y no levantan la voz en defensa del agua del Tajo? El presidente nacional, el provincial y el senador apuestan por beneficiar a la cuenca cedente y hablan de diálogo y pactos a nivel nacional. Sin embargo, ya existe un marco normativo que defiende a la provincia y un pacto regional en el mismo sentido. Entonces, ¿Qué necesidad hay de presentar una enmienda que perjuidica nuestros intereses? Queda meridianamente claro que lo que se trata a nivel nacional es de beneficiar al Levante y a Murcia, plazas donde el PP se juega mucho en las próximas elecciones regionales y municipales.

El presidente de la Región, Emiliano García-Page, y la Asociación de Pueblos Ribereños han puesto el grito en el cielo y han exigido al Partido Popular que retire la enmienda sobre el Trasvase Tajo-Segura y demandan a Francisco Núñez, líder regional de los populares, que se adhiera a su exigencia. Han obtenido la callada por respuesta.

El Decano ha publicado esta semana la información relativa al estado de los pantanos, en la que se refleja que en estos momentos Entrepeñas y Buendía se encuentran en Nivel 3, considerado de ‘situación hidrológica excepcional’, ya que almacenan 473 hm3 de los 2.510, es decir, que se encuentran casi al 19% de su capacidad, por lo que sólo se puede autorizar de forma motivada hasta 20 hm3 de agua trasvasada. Se no secan los pantanos y los quieren volver a esquilmar. 

En lo que respecta al agua, Guadalajara ha sido ya muy generosa. Demasiado. Y esa generosidad se paga ahora con un nuevo desplante del PP que amenaza con dejar al Tajo bajo mínimos y acabar con la economía y con la vida de los pueblos ribereños. No se pueden dar pasos atrás porque con el agua ya no se juega. Es urgente que las cuencas receptoras inviertan en desaladoras, aprovechen los acuíferos subterraneos y cambien su modo de explotación agrícola. Pero no les interesa. Es mejor chupar de la teta del Tajo. 

Señores del PP, no valen medias tintas. Todos y cada uno de los políticos de esta región y de esta provincia, sean del signo que sean, deben remar a una para lograr que esta tierra no vuelva a ser castigada. Está claro como el agua. Actúen. Den un paso adelante, de forma firme, y peguen un puñetazo sobre la mesa. Esa será la única manera en la que a los habitantes de la provincia les quedará claro como el agua cuál es su postura en la defensa de un bien cada vez más escaso. 

Vídeos de la noticia

Imágenes de la noticia

Categorías:
Powered by WebTV Solutions