El difícil desembarco laboral de las nuevas generaciones

Los responsables de Recursos Humanos deben analizar las diferentes expectativas y el cambio en las reglas del juego que imponen las últimas generaciones para adaptar el entorno laboral a su forma de pensar y ver la vida con el fin de impulsar y aprovechar al máximo su talento.  

Cualquier tiempo pasado fue mejor. Eso dice el poema de Manrique, pero lo cierto es que cualquier tiempo tiene su afán y más si hablamos del mercado laboral. Cada generación se adentra en el mundo laboral marcada por un contexto social y económico específico, que influye en sus expectativas laborales y en su rendimiento profesional.

Una diversidad generacional con la que han de lidiar los profesionales de Recursos Humanos para comprender sus respectivas fortalezas, debilidades y adaptarse a ellas con el fin de crear un entorno laboral inclusivo y en armonía donde poder desarrollar su labor en las mejores condiciones y contribuir al éxito de la organización. 

 
Entre las diferencias más significativas para alcanzar este objetivo que se han encontrado en Grafton, marca especializada en la selección de mandos intermedios y perfiles cualificados de Gi Group Holding, se encuentran las distintas expectativas laborales de la Generación Z, caracterizada por ser nativa digital, que ha crecido en un mundo muy volátil, y los conocidos como Millennials, quienes buscan una cultura empresarial más alineada con sus valores personales.  

 
Así, para la Generación Z, los nacidos en torno al año 2000, uno de los aspectos más valorados es la flexibilidad entre el balance de su vida laboral y personal, al igual que las oportunidades para crecer profesionalmente y el aprendizaje continuo. También valoran mucho las políticas de sostenibilidad y responsabilidad social de las empresas. En cambio, para los Millennials, aquellos que nacieron entre 1981 y 1994, uno de los aspectos más importantes es la seguridad laboral y una cultura empresarial que promueva la colaboración y el trabajo en equipo. 

 
La firma también ha encontrado importantes diferencias en cuanto a las expectativas de ambas generaciones con relación al empleo. Mientras que la Generación Z espera trabajar en un entorno que respalde su desarrollo profesional y personal, buscan retroalimentación constante y valoran las oportunidades que les permiten avanzar rápidamente en su carrera, los Millennials, por el contrario, son más pacientes. Ellos fijan sus metas y objetivos a largo plazo, y buscan roles que les permitan tener un impacto significativo en su campo o en la sociedad. 
 

El espacio de trabajo según las generaciones

 
 
En este contexto, los espacios de trabajo como las oficinas también son percibidas de forma muy diferente para los integrantes de ambas generaciones. Mientras que la Generación Z busca espacios de trabajo flexibles, y tecnológicamente avanzados, que apoyen el trabajo colaborativo y la creatividad, así como las opciones de teletrabajo o incluso el trabajo 100% remoto, los Millennials dan más valor a las oficinas con un diseño que fomente el trabajo en equipo y el bienestar, con áreas para el descanso y la socialización. 

 
"Es evidente que las diferencias entre ambas generaciones a la hora encontrar un empleo que se adapte a sus preferencias son muy significativas, no obstante, la pieza clave es la tecnología. Es importante tener en cuenta que los profesionales de la Generación Z son nativos digitales, están dispuestos a trabajar por proyectos y centrar sus objetivos en un plazo más corto que los Millennials, que otorgan más valor a la estabilidad y a puestos de trabajo que les permitan desarrollar actividades menos volátiles", afirma Mauricio Jiménez, director general de Grafton y Wyser. 

 
Contexto social y económico

 
 
Otro punto que separa a ambas generaciones es el contexto social y económico, de ahí que los Z sean más adaptables, habilidad clave hoy en día, que en contrapunto los Millennials 'suplen' con una mayor capacidad de compromiso y motivación en cada proyecto. 

 
Las reglas del juego van cambiando y evolucionando con la incorporación de las nuevas generaciones al mercado laboral, por ello, los profesionales de RRHH deben analizar cuáles son las principales variables que evalúan ahora los más jóvenes para desarrollar su carrera profesional, y adaptarse así lo mejor posible a sus prioridades a la hora de seleccionar a los mejores candidatos para cada puesto de trabajo. 

Julio Muñoz es periodista de información económica y experto en comunicación