El Decano de Guadalajara ha recibido un regalo de Reyes Magos adelantado. Se trata de un nuevo retrato que viene a ampliar nuestra particular -y peculiar- ‘Galería de Personajes Ilustres’. En ella ya figuran ‘El candidato machista’ (Mane Corral, portavoz del PP en Azuqueca de Henares); ‘El candidato ocupado’ (Javier Toquero, primer teniente de alcalde y concejal de Cultura y Patrimonio del Ayuntamiento de Guadalajara); ‘El candidato a la fuga’ (Rafael Perez Borda, ex concejal de Ciudadanos en el Consistorio capitalino); ‘El candidato sorpresa’ (Nacho Redondo, diputado regional del PP) y ‘Los diputados zoólogos’ (José Luis Arcángel y Víctor Morejón, diputados de Vox en la Diputación Provincial).
Esta semana sumamos una cara más a nuestra lista. Se trata de Eva Henche, concejala de Vox en el Ayuntamiento de Guadalajara, a la que hemos decidido apodar ‘La concejala chiquilicuatre’ en alusión al calificativo que utilizó contra ella su jefe de filas, Santiago Abascal, durante un mitin en la ciudad en plenas elecciones municipales. Tal honor se lo ganó la edil cuando lanzó un órdago a la ultradedecha después amenazar con pasarse al grupo de los No Adscritos por discrepancias internas sobre el reparto de sillones en la Diputación y los 'dedazos' de la cúpula provincial y nacional de la formación. Vox resolvió la crisis con una jugada maestra. Henche volvió al redil y pasó a formar parte del equipo de Gobierno municipal con dedicación exclusiva, a cambio de un sueldo público de cerca de 60.000 euros al año.
Después de este espectáculo, poco o nada se podía esperar de tan insigne representante política, quien además fue premiada con las concejalías de Servicios Sociales, Inmigración, Familia, Diversidad Funcional y Relaciones con las Confesiones Religiosas. Es decir, desde hace un año y medio es la responsable de velar por el bienestar de las personas más vulnerables de nuestra ciudad, así como de diseñar políticas que fomenten su integración.
Sin embargo, nada más lejos de la realidad. En el Pleno del pasado 29 de noviembre mostró su verdadera cara marcándose un discurso racista y repleto de odio que ha levantado ampollas en el Ayuntamiento y que la oposición no está dispuesta a pasar, tal y como les avanzó El Decano de Guadalajara en una información en primicia en su edición de este martes, 24 de diciembre.
Además de utilizar un lenguaje más propio de un mitin político de plaza de toros que el que debería usarse en un salón plenario -básicamente por respeto a la institución- utilizó las críticas sobre los actos del equipo de Gobierno del 25N para arremeter contra la inmigración como la causante de la inseguridad ciudadana y de la violencia contra las mujeres. Por no hablar de otras 'lindezas' que salieron de su boca.
Un discurso nauseabundo que le ha valido una denuncia de Aike ante la Policía Nacional. El grupo municipalista se ampara en el artículo 510 del Código Penal, que establece en España penas de prisión y multas para aquellas personas que públicamente fomenten, promuevan o inciten directamente al odio, hostilidad, discriminación o violencia contra un grupo, una parte del mismo o contra una persona determinada por razón de su pertenencia a aquel por motivos racistas.
El Grupo Municipal del PSOE también ha pedido explicaciones. En este caso a la alcaldesa. En una pregunta presentada al Pleno de hoy viernes, Ana Guarinos ha preferido mantener silencio y dejar a la afectada que ejerciera su propia ‘defensa’. De modo que los ciudadanos nos quedamos sin saber si nuestra regidora opina al respecto lo mismo que sus socios de Gobierno.
Con este tipo de discursos de la derecha más extrema -de los que ya dimos cuenta en este diario en otro editorial- se fomenta el odio y el rechazo hacia cientos de vecinos de Guadalajara que tienen el mismo derecho a que se les respete sea cual sea su país de origen, su etnia, su raza, su religión o su orientación sexual. Y el hecho de que estas soflamas racistas y discriminatorias vengan de la persona que ocupa la Concejalía de Servicios Sociales e Inmigración causa todavía más indignación y vergüenza.
No nos duelen prendas. Por una vez -y sin que sirva de precedente- vamos a dar la razón a Santiago Abascal. Eva Henche es una auténtica chiquilicuatre. Según la RAE: “Persona algo arrogante y de escasa formalidad o sensatez. Sinónimos: cantamañanas, mequetrefe”.
Nosotros sumamos un calificativo más a la lista: IMPRESENTABLE (RAE: "De escasa calidad moral o intelectual").